Calabacín

Sugerencias para los pequeños

El calabacín es un alimento que no resulta difícil de incluir en la alimentación de los niños, gracias a una textura y a un sabor muy suaves. Además, en algunas ocasiones su aspecto puede confundirse con el de la patata. Los purés y cremas de calabacín son platos suaves y fáciles de comer para los más pequeños. Por ello, representan un buen modo de acostumbrarlos al sabor de esta hortaliza. También se pueden cocinar rellenos con la carne del calabacín en la salsa del relleno, como ingrediente de sopas o añadidos a ensaladas templadas que contengan, por ejemplo, patata cocida con algún otro tipo de verdura, queso, etc. Un modo de conseguir que este alimento resulte más atractivo para los más pequeños es ofrecérselo en forma de pastel de calabacín, o bien añadir una salsa bechamel y gratinarlos con un poco de salsa de tomate y queso rallado.